la vida continúa

Ya se han ido mis amigas de aquí, y me quedo yo sola, en mi piso enorme, hasta dentro de unos días que llegue uno de mis compañeros. Vuelve la rutina, el currar de vez en cuando en la bocadillería (en la que no sé porqué me han subido el sueldo, pero me lo han subido, un euro más cada hora, no está del todo mal), el estudiar para los exámenes que me han puesto en unas fechas tan malas, el  tener que salir de casa para poner la lavadora, incluyendo que llueva, como pasa hoy, y como ha pasado absolutamente todos los días que he decidido poner una lavadora en esta ciudad.

Estos últimos días han sido geniales, yo me lo he pasado genial, la verdad es que al final creo que son las personas que han venido a verme con las que menos turismo he hecho, entre otras cosas porque una se puso enferma, pero son con las que mejor me lo he pasado (lo siento por el resto, pero es que ha estado muy bien, nos hemos reído un montón, porque somos todas unas cabras locas, y nos hemos acabado riendo de cualquier cosa)

Se me está haciendo rara la vuelta porque yo aquí compartía un piso de 4 habitaciones y ahora estoy yo sola, porque éramos unos 200 erasmus españoles y ahora quedamos 4, pero está muy bien, porque también está haciendo un calor insoportable, algo a lo que no estaba acostumbrada, y porque veo que sigo hablando y quedando con las personas con las que quería hacerlo, la vida sigue...